Un soporte para monitor es una inversión a largo plazo. Por eso, presta atención a estas especificaciones cruciales:
1. Tamaño, Peso y Capacidad de carga (¡Crucial!)
Este es el factor más importante. Un monitor ligero de 24 pulgadas es suficiente con un brazo estándar, pero para un ultrawide de 34 pulgadas pesado o una pantalla curva grande, necesitas una estructura robusta con alta capacidad de carga. Siempre verifica el peso que el brazo puede soportar y compáralo con el peso de tu monitor.
2. Compatibilidad VESA
El estándar VESA asegura que tu pantalla encaje en casi cualquier soporte universal. Son los cuatro orificios para tornillos en la parte trasera de tu monitor (normalmente 75x75 mm o 100x100 mm). Verifica siempre esta medida antes de hacer el pedido.
3. Tipo de montaje
Abrazadera de escritorio (C-clamp): La más flexible, no requiere taladrar. Ideal para la mayoría de escritorios.
Paso a través (Grommet): Taladrado a través de la superficie o usando una abertura de cable existente. Ofrece mayor estabilidad, ideal para pantallas pesadas o dobles.
Montaje en pared: Para ahorrar el máximo espacio.
4. Requisitos especiales (Gamers & Diseñadores)
Gamers: Necesitan estabilidad y un brazo que soporte el peso de pantallas grandes.
Diseñadores gráficos: Consideran crucial que la pantalla pueda girarse verticalmente (modo retrato) para revisar documentos largos o diseños. Asegúrate de que el brazo permita esta rotación (pivot).